domingo, 11 de diciembre de 2016

Errores

Tengo que reconocer que he cometido un error. Y es que siguiendo mis creencias y buscando el amor duradero, esto se me fue de las manos. Pese a todas las señales más que evidentes por parte del receptor de todo mi cariño, mi cerebro borracho de amor era capaz de darle la vuelta al mayor de los desprecios hasta acabar hecha pedazos.
No estoy segura de lo que ahora voy a afirmar, ya que el cerebro tiene tendencia a borrar los malos recuerdos, pero la verdad es que no recuerdo un dolor tan grande, hasta el punto de tener que ausentarme de mi trabajo, por una ruptura sentimental.
Era septiembre cuando mi relación con M se exploto en mil pedazos, dejándome no sólo el corazón hecho añicos, sino que el alma y mi autoestima en el más profundo   de los subsuelos. Desde entonces amigos, ciberamor y psicología a para intentar paliar este dolor.
Aunque reconozco que el dolor a ratos es soportable me halló inmensamente pérdida, enfada, asustada y sin acabar de perdonarme como me he podido dejar de hacer tanto daño. Como he podido hacerme tanto daño.
Hacia siglos que no podía escribir 📝

lunes, 26 de septiembre de 2016

Desde la más profunda tristeza

Desde bien pequeña que tengo esta sensación, me siento sola.
Me siento sola en compañía y me siento sola en soledad.
No es la primera vez ni la última que escribiré esto.
Se acerca el día que mas detesto de año y lo hago con el corazón roto y sin ninguna posibilidad de que alguien lo arregle. Tomándome mi tiempo para no volver a cometer los mismos errores. Pero sin ánimo alguno de que alguien lo pueda hacer latir. No se que hacer. No se como repara el daño que he hecho si es ese el motivo de mi castigo. Debería haber dejado que alguien me insultara o me tocara sin mi consentimiento?
Es eso lo que estoy haciendo mal?
Me quedan muy pocas fuerzas. Ayuda
Pensaba explicar mis buenos propósitos, pero como decía no me quedan fuerzas

domingo, 20 de marzo de 2016

Hola 2016

3 meses sin escribir ya era hora de ponerme a ello. Durante lo que llevamos de año he intentado ser un poco más fuerte y disfrutar de lo bonito de ni vida. Recuperar viejos amigos, reforzar lazos con los que siempre están ahí y abrir los brazos a gente nueva. No quiero olvidarme de querer.
Ayer mientras paseaba tuve una revelación, me gustaría compartir mis paseos con alguien, como tiempo atrás hice.
Quiero aumentar mis ratos de ocio. Sufrir con gente como M, me hace restarme de tiempo para mi. Queda mucho por hacer en este campo, pero creo que está vez he dado un paso firme hacia mi objetivo. Me tocará vivir un tiempo sin mariposas, pero que le vamos a hacer. Debo recuperar mi equilibrio para ser feliz.
Si me tuviera que definir mi vida ahora diría que es bonita, pero con pequeños baches ocasionales. Atrás quedan los días grises.
En el próximo post hablaré mi relación con mi trabajo y os aseguro que es una reflexión muy interesante
Saludos

viernes, 11 de diciembre de 2015

Reflexiones desde las amígdalas

El título de este post no es metafórico, es que he vuelto a tener un episodio de mis anginas y casualmente después de ver a M. Sin duda este chico tiene una cepa de algo a la que aún no poseo inmunidad.
Pido disculpas por no escribir, pero siempre que estoy bien me cuesta hacerlo, así que aprovecho este parón que el cuerpo me ha rogado para contaros un poco.
Mi viaje a NY fue el fin a mi depresión. Cambiar de aires sienta genial y sin duda tomo nota para mi siguiente bajón (no soy pesimista soy realista). Lo llamó depresión pero dicen los expertos que el cuadro que presentaba está más cerca del estrés. No es que el viaje me haya curado pero tomar distancia de ciertas cosas siempre va bien. Y vuelves a la misma realidad que te atormentaba y la ves con otros ojos, quizá más realistas. Lo que percibes ahora no es que sea menos negro, ni tan sólo gris, sino que es blanco. Y es que esa misma vida a la que no podías mirar a la cara ahora te parece preciosa.
Siempre intento conocerme un poco más a mi misma. Y pese que cuando me enamoro, lo hago hasta los tuétanos (me encanta esta expresión), soy una persona a la que le cuesta convivir y que le encanta encontrar la paz cuando llega a casa. Una conquista eterna encaja con mi forma de ser pero no un matrimonio. Por lo que, voy a dejar de sufrir por no alcanzar algo que no va conmigo.
Pero esto que les contaba se da de morros, con otra parte de mí, el deseo de ser madre. De hecho, el desencadenante de mi bajón es la ruptura con M. Y más allá de desvincularme sentimentalmente de él, es el hecho de que mis últimas esperanzas de ser madre acompañada se desvanecían. Era un duelo doble, por perder un compañero y por perder un hijo. Parece drástico, pero con lo que cuesta conocer a alguien cuando tu entorno esta cerrado y más establecer un vínculo sentimental, disculpen que sea realista y tire la toalla. Pero, hay algo más que contar. De forma instintiva y antes de contaminarme de relaciones tóxicas, ser madre soltera me parecía la mejor idea. Pero supongo que el reciente empacho de amigas cuentame (*) y anotaciones varias hacia mi iniciativa como "ay pero que te metan un palo frío por ahí que mal, no?" o "la hija de mi jefa también lo hizo, aunque normal porque no la soportaba nadie", me hizo abandonar esta idea. Pero después de ver que una famosa, que no quiero mencionar, con poca pinta de que le vayan mal las cosas y con menos aún de no poder tener al hombre que ella quiera con sólo guiñar un ojo, mi percepción cambió. Con todo esto, llegue a la conclusión de que toda esta información me distorsionaba mi realidad y que por haber nacido mujer y haber conseguido una independencia económica y tener una familia que me quiere, tengo aún la posibilidad de llevar a cabo mi sueño (si mi cuerpo lo permite), sin la necesidad de ser pisoteada por nadie.

Encantada de haberme conocido, lo confieso

(*) Amigas cuentame: dícese de aquella amiga que similar a aquella serie de la tv, que diría empezó ambientada en los años 60, en pleno siglo XXI, se casan y acto seguido se quedan embarazadas.

jueves, 12 de noviembre de 2015

Buenas vistas

No se porque razón un día deje de disfrutar de la vida.
Hace mas de dos años decidí cambiar de piso. En realidad, fue una de esas tantas cosas que sembré y que mas tarde recogí.
Desde mi piso se escuchan los trenes (algo que nunca me ha importado demasiado), pero también se ve el mar. Y les cuento esto porque nunca me tomo el café de las mañanas con esas preciosas vistas. Y me pregunto ¿en qué momento dejé de vivir la vida? Llevo demasiados años sufriendo por gente a la que no le importo en lugar de quererme y disfrutar con la gente que me importa.
Nunca es tarde si la dicha es buena
😘

viernes, 16 de octubre de 2015

Primeros pasos

Y a veces te enamoras sin darte cuenta. Hacia siglos que de forma involuntaria pensaba en ti. Era entablar una conversación y siempre ponía el mismo ejemplo. A veces ponía mi mirada en el pasado y te recordaba como una buena etapa.
No se equivoquen no hablo de un chico hablo de una alternativa natural, de una nueva ilusión.
Al igual que un romance no se como acabara esto. Si será algo pasajero como algún flechazo que he tenido con la enfermería, llegará a ser una amistad, como escribir este blog o acabará en matrimonio como lo mío con la ingeniería (aunque ahora vivamos una crisis por estrés)
Bueno mi amor se llama naturopatía. Unos estudios que podría compaginar con mi vida actual, que  priori es poco factible que deje mi actual trabajo, pero que quizá llene el inmenso hueco de mi corazón.
Seguiremos informando :)

lunes, 12 de octubre de 2015

Cambiar el chip

No quiero cumplir 60 años y darme cuenta de lo mucho que me he perdido.
Desde abajo quiero volver a flote sin repetir los mismos errores.
Quiero volver a enamorarme. Quiero volver a quererme, volver a confiar a no tener miedo.
Quiero cada día encontrar motivos para dar las gracias.
Y quiero recompensar todo el afecto que recibo.
Quiero disfrutar de la vida sabiendo que a muchos les gustaría estar en mi lugar, en lugar de yo en el de todos ellos.
Quiero vivir mi vida bonita sin hacerle daño a nadie y queriendo muchísimo
😍